Las cifras oficiales de la actividad económica no vieron luz hasta el pasado 15 de enero, cuando el Banco Central de Venezuela (BCV) publicó resultados del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), del Producto Interno Bruto (PIB) y de la Balanza de Pagos. Las cifras publicadas son la confirmación de que Venezuela vive actualmente la peor crisis económica. La economía venezolana comenzó un proceso de desaceleración económica en el segundo trimestre del año 2012 (2T2012) donde la tasa de crecimiento interanual pasó de 5,9% a 5,8% y tuvo su máxima contracción del PIB el 3T2015. En referencia al sector público, éste refleja tasas de crecimiento positivas para los tres primeros trimestres de 2015, lo que confirma que se trata de un Estado que cada vez adquiere mayor tamaño. Por otro lado, dentro de los sectores correspondientes a las actividades no petroleras, destacan el sector comunicaciones y los servicios del Gobierno con tasas de crecimiento positivas al 3T2015. Sin embargo, atrás quedaron las tasas superiores al 5,0% que el sector comunicaciones había visto hasta el 2T2014. En otras palabras, el sector se enfrenta a un proceso de desaceleración. Mientras tanto, el resto de los sectores presenta tasas de crecimiento negativas. En este punto resaltan los sectores de construcción, instituciones financieras y seguros, comercio, manufactura y transporte, y almacenamiento con contracciones superiores a las dos cifras. Igualmente se publicaron las cifras del INPC, pero bajo una metodología diferente a la observada en los últimos años. En este sentido, hemos notado que han modificado el peso que se da a los diferentes componentes del indicador. En general, no es descabellado pensar que transcurrirá un período largo antes de que volvamos a tener cifras oficiales. Esto motivado a la modificación de la ley del BCV donde se permite suspender la publicación de información cuando el país se enfrente a un agente interno o externo que pueda afectar la estabilidad del país. |